Añorar lo pasado

Hay un denominador común entre Huracán y Unión: Frank Darío Kudelka. Para ambos tuvo un resultado positivo, dejando un récord con más partidos ganados que perdidos. Sin embargo, el eje se distorsiona en que de Huracán se fue con una problemática relación con los hinchas (¿Cuándo no?) y en Santa Fe prima el amor sobre el odio.  

El bajo nivel que muestran ambos conjuntos en el actual torneo, sobre todo la falta de generación de juego y el poco peso en ataque, acompañan la nostalgia de un pasado que rememora a Paulo Rosales, Jorge Velázquez y Matías Quiroga o a Ramón Ábila, Cristian Espinoza y Federico Vismara.

Estos seis jugadores que fueron dirigidos por Kudelka, en su último paso por Unión (2010 a 2012) y Huracán (2013 y 2014), dejaron huella en ambos clubes y significarían claridad y jerarquía en los diezmados equipos de Juan Azconzábal y Pablo Marini.

Un talentoso pero irregular Romero Gamarra, autor del gol que le dio un respiro a Huracán, fue el único capaz de desentrañar lo que si no hubiese decantado en un empate sin goles, más allá de las buenas respuestas de Matías Castro y Marcos Díaz ante aisladas ocasiones de ambos conjuntos.

Una buena labor en las fechas restantes salvará a Huracán de una vuelta al Nacional B, pero lo mantendrá con la exigencia de una excelente campaña para salvarse en el próximo torneo. Mientras Unión no corre peligro de descenso en el actual torneo, pero necesitará imperiosamente de reencontrarse con en el buen fútbol que consiguó cuando ascendió dirigido por Kudelka para poder seguir en la máxima categoría.

¿Adónde fue el pasado que no volverá?


@Nacho_Ote

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